Huelgas masivas y manifestaciones en Francia contra reforma de las pensiones
Trenes parados, escuelas cerradas, cientos de miles de manifestantes en las calles. Francia vive este jueves una jornada de protestas masivas contra el impopular retraso de la edad de jubilación a 64 años, que ponen a prueba el crédito político del presidente Emmanuel Macron.
"Hoy será una gran jornada de movilización (...) Cuando todos los sindicatos están de acuerdo, algo poco común, es que el problema es muy grave", dijo el secretario general del sindicato CGT, Philippe Martinez, a la cadena Public Sénat.
La reforma de las pensiones es una de las medidas clave que el mandatario francés, de 45 años, prometió durante la campaña que llevó a su reelección en abril, tras un primer proyecto en 2020 que tuvo que abandonar por la llegada de la pandemia.
Pero tras años de crisis (protesta social de los chalecos amarillos, pandemia, inflación), el diario Le Parisien apunta que la reforma representa una "prueba decisiva" para Macron sobre su mandato y sobre "la huella que dejará en la historia".
El presidente, que este jueves está en Barcelona para una cumbre hispanofrancesa, intentó la víspera debilitar el frente sindical, considerando que hay sindicatos que "llama a manifestar en un marco tradicional" y otros que quieren "bloquear el país".
Aunque su intención era retrasarla de los 62 a los 65 años, su primera ministra Élisabeth Borne planteó finalmente 64 años, pero adelantando a 2027 la exigencia de cotizar 43 años para poder cobrar una pensión completa.
Estos dos puntos cristalizan el rechazo social y sindical. Según un sondeo de Ipsos publicado el miércoles, aunque un 81% de franceses considera necesaria una reforma, un 61% rechaza esta y un 58% apoya el movimiento de huelga.
El primer frente sindical unitario desde 2010, cuando intentaron en vano impedir el retraso de la edad de jubilación de 60 a 62 años por el gobierno del presidente conservador Nicolas Sarkozy, espera sacar un millón de manifestantes a la calle.
Más de 200 protestas están previstas en Francia. Las primeras ya comenzaron como en Toulouse (sur) o Marsella (sureste), antes de la manifestación de París a las 14H00 (13H00 GMT). Las autoridades esperan entre 550.000 y 750.000 manifestantes y entre 50.000 y 80.000 en la capital.
Pero, ¿se logrará el éxito de 1995? Presente en el imaginario colectivo, esta intensa protesta durante el invierno, que dejó en los andenes metros y trenes durante más de tres semanas, fue la última en lograr paralizar una reforma de pensiones.
- "Trabajaré desde casa" -
El ministro Clément Beaune ya advirtió que sería una jornada "de infierno" en el transporte y llamó a los ciudadanos a trabajar desde casa, donde muchos deberán además cuidar a sus hijos, ya que un 70% de maestros se declaró en huelga, según los sindicatos.
"Trabajaré desde casa, ya que con las huelgas no puedo arriesgarme", dijo a la AFP Abdou Syll, un consultor que debe cruzar la región de París para ir a su oficina. "Si se repite, me quedaré en teletrabajo el mayor tiempo posible".
La circulación de metros y trenes en París, donde el transporte público es clave para la economía, amaneció "muy perturbado". Una línea de metro está completamente cerrada y otras doce solo funcionan parcialmente, indicó a la AFP la empresa RATP.
La compañía de ferrocarriles SNCF también prevé que el tráfico se vea "muy perturbado" por la huelga, con la circulación de un tren de alta velocidad de cada tres o de cada cinco, según las líneas, y un tren regional de cada diez de media.
El sector de la energía se anuncia clave. El gestor de la red eléctrica francesa RTE constató una fuerte reducción de la producción, equivalente a dos veces el consumo de París, por lo que advirtió a los huelguistas que no la reduzcan más.
El sindicato CGT anunció que la mayoría de refinerías registraban entre un 70% y un 100% de personal en huelga, que, junto a los llamados a nuevos paros, reavivan el temor de una escasez de combustible como la vivida en octubre y que obligó al gobierno a intervenir.
Tras esta primera acción, los sindicatos deben decidir cómo continuarán las protestas. El gobierno debe aprobar por su parte el lunes su proyecto final, antes de su debate parlamentario que podría prolongarse hasta finales de marzo.
T.Murray--NG