Nottingham Guardian - Los franceses vuelven a las calles contra la reforma de las pensiones

Los franceses vuelven a las calles contra la reforma de las pensiones
Los franceses vuelven a las calles contra la reforma de las pensiones / Foto: Richard BOUHET - AFP

Los franceses vuelven a las calles contra la reforma de las pensiones

Francia vive este martes su tercera jornada de protestas a llamado de los sindicatos contra la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron, en un intento de aumentar la presión en pleno examen del impopular proyecto por el Parlamento.

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"Estamos ante un presidente (...) que, por un ego inflado, quiere demostrar que es capaz de aprobar una reforma independientemente de la opinión pública", algo "peligroso", advirtió el líder del sindicato CGT, Philippe Martinez, en la radio RTL.

Dos de cada tres franceses, según los sondeos, se oponen al retraso de la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y al aumento de 42 a 43 años del tiempo de cotización para 2027 para cobrar una pensión completa, como propone el gobierno.

Y, respaldados por ese rechazo, los sindicatos libran una ofensiva con huelgas y protestas pacíficas que el 31 de enero se tradujo en la mayor manifestación contra un reforma social en tres décadas (entre 1,27 y 2,8 millones de personas en las calles).

La tercera jornada de huelga general amaneció este martes con el servicio de trenes y el transporte público de París "perturbados", aunque menos que en las anteriores, y con un vuelo de cada cinco anulado en el aeropuerto parisino de Orly.

"Salgo mucho antes. Es una verdadera organización, alrededor de una hora y media más pronto para tener un tren de cercanías. Es la tercera vez en pocos días y ya empezamos a saber qué hacer", dijo Sydsa Diallo, de 36, en una estación de la región de París.

La CGT reivindicó una caída de 4.500 MW de producción de energía, equivalente a más de cuatro reactores nucleares, por los paros en este sector, así como una huelga del 75% y 100% en las refinerías de Total Energies (un 56% según la dirección).

Mantener el apoyo y la movilización es clave para los sindicatos. Las autoridades calculan que las marchas previstas este martes reunirán a entre 900.000 y 1,1 millones de personas. El gobierno anunció el despliegue de 11.000 policías y gendarmes.

Laurent Berger, líder del principal sindicato, CFDT, llamó en el diario La Croix al gobierno a escuchar a los manifestantes: "¿Cuál sería la perspectiva si no responde? ¿Necesitamos la indignación, la violencia y la ira para que se nos escuche?", se preguntó.

- "La reforma o la quiebra" -

Sus llamados por el momento no encontraron eco en el Parlamento. El lunes, en la primera jornada de debate en el pleno de la Asamblea (cámara baja), 292 diputados votaron en contra y 243 a favor de una moción de la izquierda que pedía la retirada de la reforma.

"Es la reforma o la quiebra" del sistema de reparto, les había advertido el ministro de Cuentas Públicas, Gabriel Attal. La caja de las pensiones enfrentará un déficit de unos 14.600 millones de dólares en 2030, según el gobierno.

Aunque la reforma es una promesa electoral de Macron, los observadores estiman que su reelección en 2022 se debió en gran parte al deseo de los electores de evitar la victoria de su rival en el balotaje, la ultraderechista Marine Le Pen.

Semanas después, el oficialismo perdió su mayoría absoluta en la Asamblea. Ahora busca los votos de la oposición de derecha de Los Republicanos (LR) para aprobar la reforma, ante la negativa de Le Pen y de la izquierda.

En una concesión de última hora, la primera ministra, Elisabeth Borne, anunció que las personas que empezaron a trabajar entre 20 y 21 años podrán jubilarse con 63 años, pero sin lograr convencer a todos los diputados de LR.

El gobierno escogió, no obstante, un procedimiento parlamentario que limita el tiempo de debate en las dos cámaras del Parlamento y le permite aplicar la reforma, si estas no se han pronunciado para el 26 de marzo.

Con la cuenta atrás activada, el tiempo apremia para los opositores. Los sindicatos apuestan por aumentar la presión sobre los diputados con las protestas en las calles, por lo que ya llamaron a una jornada de manifestación el sábado.

Ch.Hutcheson--NG