Repsol registra una fuerte bajada de su beneficio en el primer trimestre
El grupo energético español Repsol anunció este jueves un beneficio neto a la baja en el primer trimestre del año, por el retroceso del precio del petróleo y la diversificación de sus actividades, que le significó a la empresa importantes inversiones.
El beneficio neto del gigante español alcanzó los 1.112 millones de euros (1.230 millones de dólares) en el trimestre, un descenso del 20% respecto al primer trimestre de 2022 (1.390 millones de euros), cuando el precio del petróleo escaló ante la invasión rusa en Ucrania.
"Los precios de los hidrocarburos disminuyeron de forma notable entre enero y marzo, lastrados por las perspectivas económicas inciertas de Estados Unidos y Europa ante las dificultades para frenar la inflación global", explicó Repsol en un comunicado.
El barril de crudo bajó en promedio un 20% de media con respecto a los tres primeros meses de 2022, precisó la empresa, que dijo haber destinado adicionalmente unos 550 millones de euros para seguir "ofreciendo descuentos en sus estaciones de servicio de España".
El grupo energético, que anunció a finales de 2020 un plan de inversiones de 18.300 millones de euros hasta 2025 para "descarbonizarse", ha multiplicado las inversiones en los últimos meses, especialmente en el sector de las energías renovables.
Entre enero y marzo, Repsol invirtió 1.726 millones de euros, principalmente en España y Estados Unidos, detalló el comunicado.
El grupo petrolero español, que busca avanzar hacia un modelo "multienergético", anunció en septiembre pasado la venta de su rama de exploración-producción (upstream) por 4.800 millones de dólares al fondo de inversión estadounidense EIG.
La empresa afirmó que utilizaría ese dinero para incrementar sus inversiones en energías bajas en carbono. En 2023, Repsol prevé invertir "más de 5.000 millones de euros" en su transición energética.
Los beneficios de Repsol se dispararon el año pasado, hasta los 4.250 millones de euros, un 70% más que en 2021, gracias al repunte de los precios del petróleo, lo que reportó beneficios a las grandes petroleras.
En España, el gobierno de izquierda introdujo un impuesto excepcional sobre los beneficios de los grandes grupos energéticos, que debería permitir al Estado recaudar dos mil millones de euros anuales en 2023 y 2024.
D.Gallaugher--NG