El gobierno de Meloni descarta instaurar un salario mínimo en Italia
El Parlamento italiano, dominado por la derecha, aprobó este miércoles un proyecto de ley destinado a hacer que los sueldos sean más "equitativos", enterrando de facto la propuesta de ley del centroizquierda para crear un salario mínimo.
La Cámara de los diputados probó el texto por 153 votos a favor, 118 en contra y tres abstenciones, entre los gritos de los representantes de la oposición, que corearon "¡vergüenza, vergüenza!", enarbolando pancartas.
El proyecto de ley del centroizquierda fue reemplazado por un texto que encomienda al gobierno encontrar soluciones, en un plazo de seis meses, que garanticen "remuneraciones proporcionadas y adecuadas" para los empleados, tal y como recoge la Constitución. Sin embargo, no fija ningún mínimo obligatorio.
Italia es, junto con Finlandia, Suecia, Dinamarca y Austria, uno de los cinco últimos países de la Unión Europea en los que los sueldos se determinan únicamente mediante negociación colectiva entre patronal y sindicatos.
La oposición de centroizquierda había presentado una propuesta de ley para crear un salario mínimo, de 9 euros brutos la hora (9,70 dólares), pero la iniciativa fue rechazada por la coalición de derecha y ultraderecha dirigida por Giorgia Meloni.
"Es un día triste para la República. Ustedes solo están del lado de los explotadores, ¡le han dado un bofetón a los explotados!", lanzó, dirigiéndose al gobierno, Elly Schlein, secretaria nacional del Partido Demócrata, principal formación de izquierda.
Durante los debates con la oposición, el Ejecutivo propuso extender las convenciones colectivas a los empleados que no están cubiertos por el millar de acuerdos en vigor, un 20% del total.
Muchas convenciones siguen muy por debajo de los 9 euros brutos en Italia, como las de los servicios de limpieza (6,52 euros, 7,02 dólares), la de la restauración (7,28 euros, 7,85 dólares) o el turismo (7,48 euros, 8 dólares).
No obstante, la ministra de Trabajo, Marina Elvira Calderone, recalcó que la creación de un "sueldo decente" no requiere necesariamente "la definición de una cifra".
Según los sondeos, el 70% de los italianos -lo que incluiría a votantes del gobierno de Meloni- están de acuerdo con que se instaure un salario mínimo.
Una directiva de la Unión Europea fija las normas que rigen el salario mínimo pero no obliga a los Estados a adoptar ese sistema.
A.C.Netterville--NG