Operación policial en Hungría contra "escitas" acusados de planear un golpe de Estado
Las autoridades húngaras anunciaron el miércoles redadas simultáneas contra un pequeño grupo extremista armado, que dice pertenecer al desaparecido pueblo "escita", sospechoso de preparar un golpe de Estado en este país centroeuropeo.
Los "escitas" son un grupo de pueblos nómadas que vivieron en las estepas euroasiáticas entre los siglos VIII y II antes de Cristo.
Pero en Hungría, militantes de extrema derecha afirman formar parte de esta antigua etnia. En el censo de 2022, casi 2.400 personas afirmaron que el escita era su lengua materna.
La operación, en la que participaron 150 policías, incluida la unidad antiterrorista, se llevó a cabo el martes en la capital y varias localidades más, según un comunicado de la oficina nacional húngara de investigación NBI.
Se detuvo a ocho personas, de edades comprendidas entre los 53 y los 88 años, tres de las cuales no fueron puestas en libertad.
Los investigadores fueron alertados por un vídeo publicado en las redes sociales en noviembre, en el que el grupo proclamaba "una Hungría escita" y hablaba de crear "tropas paramilitares" con el objetivo de "desarmar a policías y soldados" y derrocar al gobierno.
Durante los registros se descubrieron diversos documentos y un gran arsenal, "señal de la determinación del grupo", según la BNI. Según las primeras informaciones, el arsenal estaba compuesto por "armas de fuego, munición, ametralladoras y varias pistolas".
El año pasado, el húngaro Alfred Pocs, conocido por sus teorías conspirativas, en particular sobre la pandemia de covid-19, presentó una propuesta al Parlamento para el reconocimiento oficial de los escitas como minoría nacional.
Sin embargo, la propuesta fue rechazada de forma abrumadoramente después de que la Academia de Ciencias dictaminara que "no se cumplían las condiciones".
Según esta institución, los escitas "desaparecieron hace más de dos milenios".
Y.Urquhart--NG