Reunión "cortés" entre Biden y Trump en la Casa Blanca
Donald Trump hizo un regreso triunfal este miércoles a la Casa Blanca, donde mantuvo una reunión "cortés" con Joe Biden, mientras sigue repartiendo los puestos de su futuro gobierno.
Después de un apretón de manos con el jefe de Estado saliente en el Despacho Oval, Trump, que fue el 45º y pronto será el 47º presidente estadounidense, aseguró que la transición será "lo más fluida posible".
La imagen de los dos hombres hablando junto a la chimenea contrasta con los ataques verbales de los últimos años, sobre todo durante la campaña del demócrata para un segundo mandato, que abandonó en julio.
Biden calificó entonces a su rival de "peligro" para la democracia, y Trump retrató a su oponente como un viejo senil.
Los dos políticos se reunieron durante casi dos horas con sus respectivos jefes de gabinete.
"Haremos cuanto podamos para asegurarnos de que tiene todo lo que necesita", dijo Biden. "Bienvenido de nuevo", añadió.
El republicano, que ganó las elecciones presidenciales del 5 de noviembre con un margen holgado, declaró al New York Post que Joe Biden y él se habían "alegrado mucho de verse".
Añadió que hizo preguntas al presidente saliente sobre la guerra en Ucrania y la situación en Oriente Medio.
"La política es dura, y en muchos casos no es un mundo muy agradable. Hoy es un mundo agradable y lo aprecio mucho", opinó Trump en el Despacho Oval, que ocupó de 2017 a 2021.
- "Muy cordial" -
La reunión fue "muy cordial, muy cortés y sustancial", declaró a periodistas la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, quien añadió que Trump llegó con "una lista de preguntas detalladas".
El presidente Biden recalcó que "el apoyo continuo de Estados Unidos a Ucrania beneficia la seguridad nacional", indicó por su parte Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Biden.
El gobierno estadounidense difundió una foto en la que se ve a Joe Biden y su esposa Jill con Donald Trump, los tres sonrientes, y otra con los dos presidentes paseando por la rosaleda de la Casa Blanca.
Joe Biden respeta las tradiciones democráticas que su predecesor, y ahora también sucesor, había dinamitado.
Trump, que nunca ha reconocido su derrota ante Joe Biden en 2020, no invitó al demócrata a la Casa Blanca para esta tradicional reunión de traspaso de poderes ni asistió a la ceremonia de investidura en enero de 2021.
En su segundo mandato tiene de su lado las principales instituciones.
El Partido Republicano ha conservado su mayoría en la Cámara de Representantes, tras hacerse con el control del Senado.
Donald Trump también puede contar con la Corte Suprema firmemente anclada en la derecha.
En los últimos días, ha hecho un nombramiento tras otro, algunos de ellos llamativos, como la designación del hombre más rico del mundo, Elon Musk, para dirigir una comisión encargada de recortar el gasto público y desregular la economía.
El miércoles nominó al latino Marco Rubio como jefe de la diplomacia y anunció que confiaría el liderazgo de los servicios de inteligencia a Tulsi Gabbard, desertora del Partido Demócrata y exmilitar, conocida por sus posiciones favorables a Rusia.
Eligió al congresista de Florida Matt Gaetz, un leal escudero, para dirigir el sistema judicial federal.
Gaetz ha sido acusado de haber tenido relaciones sexuales con una menor. Él lo niega.
Su nombramiento aún tiene que ser validado por el Senado.
"Matt pondrá fin a la instrumentalización de nuestra administración", estimó Trump en su red Truth Social.
El presidente electo, criminal convicto, acusa al actual Departamento de Justicia de haber fomentado una "caza de brujas" contra él.
"Sospecho que no volveré a presentarme a menos que digáis: 'Es bueno, tenemos que contemplar otra cosa'", les dijo.
D.Gallaugher--NG