Correr 200 maratones en un año, "loca" aventura para sensibilizar sobre la escasez mundial del agua
"Creí que era un problema y me encontré con una catástrofe", dice en entrevista con la AFP la australiana Mina Guli, quien este miércoles alcanzó la marca de 200 maratones corridos en un año para "llevar la voz" de las comunidades afectadas por la problemática vinculada al agua en el mundo hasta los centros de poder.
Desde el desierto australiano a los glaciares de Tayikistán, pasando por la Amazonía o los parajes próximos a los ríos secos de África visitados por pastores, Guli,, ha recorrido en total unos 8.440 km en 32 países, concluyendo su carrera en los brazos de su madre frente a la sede de la ONU, en Nueva York, donde tiene lugar hasta el viernes una Conferencia mundial sobre el agua.
¿Un desafío loco?. "Yo creo que también estoy loca", señaló al participar en su 198º maratón a principios de semana en el Central Park de Nueva York.
Pero esta exabogada de 52 años resaltó que así "quiero sensibilizar (a los gobiernos) sobre la crisis mundial del agua, quiero mostrar la urgencia del problema que estamos enfrentando."
"No soy una corredora nata, no he crecido corriendo, en realidad, no me gusta correr", admite.
"Corro porque quiero llevar la voz de los que están en la primera línea de esta crisis hasta los centros de poder y servir de inspiración para que funcionarios y dirigentes de empresas actúen", insiste la creadora de la Fundación Thirst -una ONG enfocada en la problemática del recurso del agua-, antes de contar emocionada su periplo atlético bautizado como "Run Blue (Corre azul)".
Guli resalta que se encontró frente a "una catástrofe" durante su recorrido, poniendo como ejemplo que "mujeres y jóvenes caminan durante horas y arriesgan su vida para ir a buscar agua" que puedan consumir.
Relató que ha corrido por lagos secos pasando "junto a barcos varados en la arena", o próximo a los glaciares de Tayikistán que se derriten bajo el efecto del cambio climático.
"Lo que he visto me ha roto el corazón", asegura. "Una cosa es leer los datos en el periódico en negro sobre blanco, pero cuando vas y lo ves, se te parte el alma, el dolor de la gente", prosigue, con lágrimas en los ojos.
Es por ello que insta a "nuestros gobernantes, en especial esta semana, a que actúen, escuchen estas voces y digan 'vamos a hacer todo lo posible para resolver esta crisis'", dice Mina Guli, quien confiesa que está "un poco triste" por la conclusión de esta aventura.
En 2018, la australiana ya se había lanzado en un proyecto de 100 maratones en 100 días, antes de fracturarse una pierna al día 62. "Creía que podía movilizar y crear un cambio instantáneo, pero la verdad, es que el cambio lleva tiempo", expresó con cierta frustración.
F.Coineagan --NG